MÁSCARAS

 

Queridos lectores, el blog de hoy me hace especial ilusión, voy a comentaros como ha sido y como he vivido toda la experiencia de creación de máscaras.

Florencio, nuestro profesor, nos propuso un reto para las próximas semanas de curso, como actividad broche de la asignatura, la cual consistía en elaborar desde cero una máscara, inspirada en aquel Pokémon que creamos hace días atrás.

Se nos proporcionaron todos los materiales necesarios para crear aquello que quisiésemos: cartón, plástico, poliespán e incluso escayola para que aquellos detalles más rebuscados pudiesen quedar definidos a la perfección.

He de admitir que mis primeras sensaciones fueron de incertidumbre, pues realmente no sabía ni como empezar, la forma del Pokémon era algo complicada, se trataba de una mariposa, y no sabía como unir el concepto de máscara y cuerpo de dicho animal. Finalmente opté por una vía más sencilla, planteé que mi máscara fuese de forma triangular y en cada lado pegaría las alas correspondientes.

A medida que iba avanzando, disfrutaba más. El clima de la clase era muy positivo, había música de fondo, nos movíamos libremente por el aula, y los materiales eran prestados entre grupos siempre con amabilidad. También disfrute mucho la libertad artística de poder llegar a un resultado totalmente propio, único y personal, distinto al de los demás.

El resultado obtenido fue el siguiente:


Intenté agregar el máximo de detalles posibles, al igual que colores. Soy una persona muy visual, mis ojos siempre van a aquello que contiene más colores, más brillos, además, creo que las creaciones coloridas generan una sensación indirectamente positiva, por lo que sin duda mi resultado iba a contener colores vivos y divertidos.

El material principal fue el cartón, aunque también incluí poliespán para que la unión de las alas quedase mucho más uniforme, también cuerda en la fachada de las alas. Y como es evidente, témperas y rotuladores para dar color y detallar al máximo.


Para que mi máscara fuese más estable y no se cayese, coloqué en la trasera cuerdas de extremo a extremo, a modo de barrera, la cual permitía el paso de mi cabeza per impedía que se cayese o fuese para los lados.


Sin duda ha sido una de mis propuestas de trabajo favoritas, creo que sería muy divertido e interesante trabajarlo en aulas con niños de Educación Primaria.


Y a vosotros, ¿Qué os ha parecido?


✌¡Os leo!✌

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